Hoy por primera vez en mi vida probé el ya clásico marplatense alfajor Manolo, una marca muy reconocida por su historia y sus afamados churros. Y elegí empezar con nada más y nada menos que con su Alfajor Gigante, un producto que lo presumen con un orgulloso slogan “Creadores del Alfajor Gigante”.
La catación:
El alfajor Manolo Gigante está cubierto con un excelente baño de chocolate que reclama constantemente un papel radiante en el paladar, la masa de la tapas son súper blanditas y un poco esponjosas, abiscochuleadas y de sabor a chocolate. El dulce de leche no empalaga y tampoco desentona con el resto del alfajor. Gracias a todas estas características el alfajor posee una identidad propia. Por momentos al comerlo se siente como un hibrido entre torta y alfajor. Su gran tamaño no implica problemática alguna y se deja comer confortantemente a pesar de su gran tamaño, se mantiene bastante completo y sin desarmarse.
No es un alfajor para comer al paso, está hecho para ser disfrutado cada bocado estando tranquilo, sentado y sin mayores apuros, apreciando los secretos de cada parte integrante de esta monstruosa obra. Recomiendo comer este alfajor con tu gaseosa favorita bien fresca, es la mejor manera de bajarlo. Yo me lo comí solito todo, pero tranquilamente pude haber compartido la mitad y quedar satisfecho.
El secreto para que los alfajores grandotes sean geniales como en este caso, es que paradójicamente el tamaño no importa, simplemente tiene que ser un alfajor de gran calidad y buen sabor, los gramos de más solo se justifican si se logra disfrutar de un buen producto.
¿Te bancás un alfajor de este tamaño? ¿No lo probaste y querés conseguirlos? No hace falta que viajes a Mar Del Plata por unos de estos clásicos y sabrosos alfajores Manolo, si sos de Wilde podés conseguirlos en @laestacioncandy, la tienda de golosinas con la variedad de alfajores más interesante.
Otros datos: Shacar Traders S.A. - PAMS 404927922
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