Ricardito clásico, el bocadito uruguayo.

Es la golosina uruguaya más fácil de conseguir en los kioscos.  Es el bocadito que cumple con lo que promete y no decepciona en lo absoluto. El Ricardito básicamente es merengue sobre una oblea, todo esto  recubierto con chocolate, y posta que es chocolate y no baño de repostería. Lo más probable es que se te derrita en la mano si no te apresuras a comerlo y tendrás que chuparte los dedos. Una golosina simple pero muy bien hecha.

El producto se presenta en una caja y adentro una bolsita transparente sellada que conserva el producto. Para abrir la caja tiene una tira troquelada que dice “tire aquí”, pero está al divino botón porque resulta fácil abrir el producto por cualquier otro lado. 

Es muy muy muy muy dulce, es decir, tan dulce que puede resultar empalagoso, estoy seguro que no te comerías más de tres seguidos. Quizás sea tan popular por lo extremadamente dulce que es, es básicamente esta característica lo que la define. La textura del merengue es perfecta y la oblea acompaña sutilmente dejando disfrutar el sabor de esta golosina es su plenitud.

Esta golosina es capaz de dejar  

sumamente satisfecho a cualquiera.

Es fabricado por Ricard-Plucky S.A.

Mi puntaje 10/10